Seguramente hayas escuchado hablar de ellos, pero no tienes muy claro qué son exactamente. Hablamos de los implantes zigomáticos, una solución perfecta para aquellos pacientes que, además de una o varias piezas dentales, han sufrido una gran pérdida de hueso maxilar superior.
Desde CEID Clínicas Dentales Implantología-Estética, como grandes especialistas en este campo, podemos contarte que una vez que perdemos uno o varios dientes, el hueso maxilar inicia un proceso de reabsorción, produciéndose una pérdida de altura y anchura ósea.
Es por ello que, en aquellos pacientes que han estado mucho tiempo sin dientes, la colocación de un implante convencional no suele ser una solución muy recomendable, apostando en estos casos por los implantes zigomáticos. Se trata también de una alternativa muy recomendable para aquellas personas afectadas por factores como la enfermedad periodontal o el uso de prótesis removibles.
Como decimos, esta clase de aditamentos se utilizan en situaciones en los que no se dispone ni de la calidad ni la cantidad de hueso maxilar suficiente para soportar un procedimiento corriente y también en situaciones en las que las técnicas de regeneración ósea, como los injertos, no garantizan resultados.
Si los tradicionales se colocan sobre el maxilar, los implantes zigomáticos se fijan en diagonal en el hueso cigomático, que se encuentra en el arco óseo de las mejillas. Este hecho provoca que su tamaño, entre 35 y 55 milímetros, sea mucho más largo que los convencionales, apenas 18 milímetros como máximo.
Desde CEID Clínicas Dentales Implantología-Estética podemos contarte que, como puedes imaginar, la complejidad de un tratamiento de este tipo es muchísimo mayor. No en vano, estamos ante una intervención mucho más invasiva. Este hecho provoca que los procedimientos de esta clase se reserven para rehabilitaciones completas de la arcada superior con pérdida extrema de hueso.
Pese a su dificultad, el hueso cigomático ofrece una superficie óptima, tanto para el anclaje como para la posterior osteointegración de los aditamentos. Es por ello que su tasa de éxito a largo plazo es muy alta y, por tanto, muy recomendable para ese perfil de paciente.
Como no podía ser de otra manera, la colocación de implantes zigomáticos ha de ser realizada por verdaderos especialistas, capaces de ofrecer un asesoramiento global y adecuado a cualquier persona que estuviera necesitada de un tratamiento de esta clase.
